Extintor para casa

¿Es Útil un extintor en casa?

Tan solo se requiere una pequeña llama para que de manera rápida, o más lenta, se llegue a un incendio de gran magnitud. Los primeros instantes son cruciales para su desarrollo. En ocasiones, se puede apagar con solo una mano o un paño; sin embargo, al pasar unos pocos segundos ya se requerirá un extintor para poder controlarlo, y, si no se tiene, no ha de pasar mucho rato hasta que la intervención de bomberos logre detener el desastre. Un extintor solamente sirve para atacar fuegos incipientes, por lo que no es adecuado cuando el fuego ya es un incendio.

¿Y dónde pongo los extintores?

● Además de escoger el tipo, tamaño y clase adecuados, se requiere que sea instalado y mantenido correctamente.

● Es aconsejable tener al menos un extintor en cada nivel de la casa, próximo a las zonas con peligro potencial de incendio y cerca de las puertas de salida.

● La cocina es uno de los lugares de la casa con mayor riesgo, aunque es cierto que cualquier electrodoméstico puede provocar un incendio. Todos los recintos que cuenten con alguno de estos aparatos deben contar con un extintor a mano, tales como el lavadero, garaje, pieza de la caldera y subterráneos. Un extintor de polvo y una manta ignífuga son ideales para apagar estas llamas. Hay que tener claro que en caso de fuego en una sartén con aceite en ningún caso se debe usar agua para apagarla ya que el aceite salta y expande el fuego por otros lugares de la cocina.

● Coloque los extintores en lugares fácilmente accesibles y visibles, apoyándolos en soportes fijos a un pilar, una pared u otro elemento vertical. La parte superior debe estar a una altura máxima de 1,70 metros sobre el nivel del suelo.

● En zonas más públicas (como son los halls de acceso y pasillos de edificios) se aconseja señalizar gráficamente su posición.

¿Qué extintor me viene mejor?

Para conocer exactamente cuál es tipo de extintor se debe comprar, primero hay que saber a qué nos podemos llegar a enfrentar.Según la reglamentación española, existen varios tipos de fuego:

Clase A. Fuegos sólidos, donde se queman materiales en forma sólida, que acaban dejando brasas en su descomposición...

Clase B. Fuegos considerados de tipo líquido.

Clase C. Fuegos considerados de tipo Gaseoso.

Clase D. Fuegos en metales.

Como se trata de un hogar “normal”, la mayoría de los fuegos suelen ser tipo A, sólidos, ya que no es posible ni legal almacenar líquidos inflamables en casa (excepto alcohol, y no es de los de quemar).

El fuego se compone de 3 partes sin las cuales no puede existir y que todos conocemos.

1º El Oxigeno

2º El Combustible

3º El Calor de Iniciación o Foco de ignición

Sabiendo qué tipo de riesgo existe, y cómo se puede apagar este fuego, se elige el extintor más adecuado.Extintores hídricos o de agua. Son extintores que eliminan el fuego por enfriamiento. Son ideales para fuegos de clase A, los habituales en los hogares, pero hay que extremar las precauciones al utilizarlos en fuegos de tipo líquido porque se puede llegar a extender el fuego; y en fuegos con componente eléctrico, porque el agua transmite la electricidad.

Extintores de polvo polivalente AB y ABC. Son extintores con un agente extintor que acaba con el fuego por sofocación (quitando el oxígeno) e inhibe la reacción en cadena que produce el fuego. Son los más utilizados y los más prácticos, ya que sirven para casi todo tipo de fuego. Sus principales pegas son que la utilización en espacios cerrados puede dar lugar a sofocación (falta de oxígeno por la propia respiración) si no se utilizan bien, y si se usan en aparatos eléctricos acaban sulfatando todos los cables y circuitos inutilizándolos de forma permanente.

Extintores de CO2 o de nieve carbónica. Estos acaban con el fuego por sofocación y favorecen la enfriación de los materiales en combustión ya que salen a muy baja temperatura del contenedor. Pueden ser utilizados en fuegos de tipo A y B, siendo muy útil en fuegos con componentes eléctricos. El único problema es que es tóxico a altas proporciones.

Extintores especiales. Se trata de extintores específicos para riesgos muy determinados, como son los fuegos de metales.

Para un uso particular en el domicilio o vehículo personal es recomendable siempre utilizar extintores de polvo polivalente, ya que son de más fácil manejo, polivalencia y baja (casi nula) toxicidad.

Recomendaciones para su utilización

1º Conserve el extintor en un lugar seco, donde no le dé el sol. La vida del casco exterior del extintor va a ser garantía de un buen funcionamiento. Consérvelo en buenas condiciones y haga una revisión por parte de una empresa autorizada por lo menos una vez cada dos años.

2º Si alguna vez tiene que llegar a utilizarlo, mantenga la calma, pruébelo en el lugar y diríjase con tranquilidad hacia el fuego. Cuando se acerque a más o menos un par de metros del fuego, dirija el chorro del extintor a la base de las llamas, nueva la boquilla de lado a lado, con lentitud. El extintor tarda muy poco en quedar vacío (cerca de 1 kilo de agente extintor por cada 2 segundos de uso), algo que demuestra que no debe desaprovecharlo. Si consigue apagar el fuego sin llegar a consumir todo el extintor, consérvelo por si se vuelve a activar el incendio.

Si el fuego se produce al aire libre, no se olvide de conocer la dirección del viento.

3º Una vez que se usa un extintor, es necesario llevarlo a una empresa autorizada para rellenarlo y retimbrarlo. Solo estas empresas pueden asegurar su tranquilidad.

¿Y qué tamaño es el más adecuado?

Los extintores varían de tamaño desde 1 kilo hasta 50 kilos. Lo normal es contar con uno de 1 Kilo en el vehículo. Para contar con uno en casa, se puede optar por varios tamaños, aunque el más habitual es de 6 kilos. Los extintores de 50 kilos solo se recomiendan en instalaciones con gran carga de fuego, como depósitos de gasoil o propano, etc.

¿Dónde comprar?

Para realizar una buena compra, hay que mirar que se cumpla la normativa española y que las especificaciones técnicas sean las correctas (sobre todo si se compra fuera de la CEE). La eficacia de los extintores para cada tipo de fuego viene en una pegatina que se lleva en el casco exterior y que se clasifican en números. Estos números sirven para saber para qué tipo de fuego utilizarlo.

Mire siempre qué extintores hay su alrededor, por si un día tiene que tener que llegar a utilizarlos porque en ese momento no tendrá tiempo de conocer estos detalles.

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