Prevenir un incendio en casa
Muchos incendios urbanos son provocados por descuidos o por la utilización incorrecta de aparatos eléctricos. Los bomberos tienen que extinguir cada año docenas de quemados que se originaron por ollas o sartenes olvidadas al fuego mientras el ocupante de la vivienda salía a hacer algún recado o estaba haciendo otras cosas; aunque también por sobrecargas en la red eléctrica por haber enchufado en la misma regleta varios aparatos de gran potencia.
El incendio es totalmente perjudicial para la vivienda. En el mejor de los casos, habrá que cambiar todos los muebles de una habitación y pintar nuevamente el piso; en el peor, la vivienda puede quedar inhabitable durante varios meses, todas las posesiones de la familia se destruyen, tanto objetos de gran valor sentimental como económico y podría causar la muerte de personas. Las noticias hablan mucho de ello en los últimos meses.
Hay varias medidas de prevención que podrían reducir significativamente el riesgo de que se declare un incendio o minimizar los daños en caso de que se produzcan, en la medida de lo posible, evitar el sobreuso de las regletas. Por ello, no se deben enchufar en la misma varios aparatos eléctricos con una potencia elevada, como planchas, estufas, deshumidificadores o mantas eléctricas, entre otros. Es mucho mejor usar diferentes enchufes si se requiere utilizar simultáneamente varios aparatos con un gran consumo.
Otro consejo es el alejar de los equipos que producen calor los materiales que puedan arder, tales como cortinas, ropa, alfombras o sofás. Tampoco es bueno contar con este tipo de elementos próximos a las regletas, especialmente si éstas alimentan a varios electrodomésticos con potencia elevada.
También dice que se han de prestar atención a los descuidos. Que hay atender siempre a la cocina de lo que se está cocinando, y también se ha de extremar las precauciones con las mantas eléctricas, no dejándolas nunca encendidas sin vigilancia.
También hay que prestar atención a las chimeneas, limpiarlas frecuentemente, ya la grasa de las campanas extractoras o el hollín pueden ser un riesgo para el hogar.
Otro de sus consejos es contar tener en casa detectores de humo y extintor CO2, siendo estos equipos que pueden salvar vidas o reducir daños materiales si se produce un incendio en el hogar. Con respecto a los detectores de humo se tratan de equipos fotoeléctricos, con pequeño tamaño, que se adhieren al techo y que hacen que suene una alarma en caso de que se detecte humo. Su precio gira en torno a los 20 hasta los 40 euros, y su funcionamiento es a pilas. Se ubican en las estancias donde puede llegar a haber riesgo de incendio, y su principal ventaja, entre otras, es que podrían llegar despertar a una persona que está durmiendo en un piso en el que se acaba de iniciar un fuego.
Es recomendable tener un extintor en la cocina, ya que puede ayudar a sofocar con rapidez un conato. Sobre todo es mucho mejor que sea de CO2, ya que aunque los de polvo funcionan igual manchan mucho más y limitan más la visibilidad. Cuestan sobre 20 euros.
¿Qué hacer en caso de estar dentro de una casa que está ardiendo? Si solo es un conato puede intentar apagarse con la ayuda de un extintor, ya que elementos como el agua pueden llegar a ser contraproducente si se utilizan contra un aparato eléctrico.
Si el fuego ya tiene mayores dimensiones, es mejor abandonar la vivienda y confiar en los profesionales como bomberos. Al salir del piso, se debe cerrar la puerta para evitar que el humo llegue al resto del edificio. En caso de quedar atrapados, por humo o llamas, lo recomendable es entrar en una habitación alejada del foco del fuego, tapar las rendijas de la puerta con toallas o trapos húmedos e intentar que las otras personas conozcan lo que está sucediendo, hacerse ver, llamar a los equipos de emergencias. Es necesario ocultar la boca y nariz con un pañuelo o trapo húmedos para inhalar lo menos posible monóxido de carbono.
Si hay fuego en el piso de un edificio, no es necesario que los ocupantes de otros pisos salgan a la calle, y de hecho es más peligroso si el humo llega a pasillos o escaleras. Puede ser mejor quedar en casa buscando una estancia lejos del rellano y con la ventana cerrada. Si se quiere ventilar, se deben abrir las habitaciones donde no hay personas.